Hay muchos tutoriales sobre vermicompostaje circulando por internet. Múltiples páginas, videos de youtube, Instructables, etc. Como cada uno tiene sus circunstancias, su espacio y sus recursos, yo hice un poco de estudio de las propuestas y preparé la que me parecía mejor para mi situación. Mi casa es pequeña, con un pequeño patio comunitario que tiene más trastos que sitio. Tengo 2 niños (el pequeño MUY travieso) y un perro grande. Como se puede ver, todo a mi favor, por lo que me tuve que decantar por un vermicompostador vertical de varios pisos que pudiera colocar en alto o trasladar en caso de helada o demasiado calor. Quizá me haya quedado pequeño para la cantidad de desechos que producimos en casa (o es que tenemos una dieta más rica en verduras de lo que me creía). He de puntualizar que estoy escribiendo este tutorial antes de tener las lombrices. He construido la vermicompostadora y he empezado a echar los desperdicios vegetales para que fueran empezando a descomponerse a la espera de las inquilinas (según leí en algún sitio les gusta lo que ya ha empezado a descomponerse, no tocan lo que esté fresco). En un día ya tenía el primer piso lleno. Me falta ver si es verdad que son tan rápidas comiendo y defecando. Porque no nos engañemos, queda muy fino decir humus de lombriz, pero es caca de gusano.

Step 1: Comenzamos...

Comienzo con la explicación.

Como ya he dicho el diseño no es mío. Consiste en unos cubos apilados unos sobre otros donde se echan los desperdicios vegetales y en los que viven las lombrices.

Como se puede ver en la foto he reutilizado unos botes de huevo cocido de una cocina industrial. Están muy bien fregados y con sus tapas. Son bastante grandes (aunque quizá no lo suficiente).

No tengo muchas fotos por lo que intentaré explicarme lo mejor posible.

Step 2: Planta Baja

El cubo de abajo tiene una boquilla para extraer los lixivados. Es líquido resultante del proceso de transformación de los desperdicios que también tiene un alto contenido en nutrientes y se utiliza como abono líquido. Para ello he utilizado el cuello de una botella de plástico. Se hace un orificio en la base del cubo donde se va a insertar el cuello de la botella. Este está cortado cerca del final dejando solo un poco del inicio de la botella para poder sellarlo por dentro. Lo he colocado con un poco de inclinación hacia abajo para que sea más fácil que salga el líquido cuando lo necesite.

Está sellado por dentro y por fuera con pegamento termofusible. También en este cubo se coloca una red anticaídas para evitar que las lombrices despistadas caigan al líquido y se ahoguen por no poder subir.

Esto habrá que vigilarlo de vez en cuando para ver si el nivel del líquido ha subido por encima de la red. En mi caso he utilizado un trozo de malla mosquitera para las ventanas. Está colocada a una distancia suficiente para que entre correctamente el cubo que se ponga encima. La he pegado también con pegamento termofusible.

Step 3: Plantas Primera Y Ático

En la base de los demás cubos se hacen unos orificios para que las lombrices puedan pasar de un piso a otro. El método de trabajo es el siguiente: se echan los desperdicios en el primer piso (El cubo de lixivados es la planta baja) y las lombrices van procesando (comer-cagar, comer-cagar, …), cuando se vea ese compartimento lleno se empiezan a echar los desperdicios en el siguiente. Las lombrices solas se irán al piso de arriba cuando ya no tengan nada más que procesar en el que están. En ese momento tendrás un rico humus de lombriz listo para abonar tus plantas.

También he hecho unos agujeros en la parte de arriba de cada cubo para que el sistema pueda respirar y no se concentren gases (y huela mal) ni se ahoguen las lombrices. Están protegidos con más malla mosquitera para evitar fugas o intrusiones, no es nada recomendable que entren mosquitos u hormigas (las últimas sobre todo porque matan a las lombrices).

EDITO: Después de un tiempo haciendo sus cositas, nos encontramos a las lombrices muertas. Tengo la desagradable sensación de que se asfixiaron por lo que los respiraderos tendrán que ser más grandes de lo que los hice la primera vez. Es la primera vez que hacemos compostaje en casa, así que tampoco es que tengamos muy claro que fuera únicamente por eso, pero no creo que pase nada por dar más oxígeno al sistema.

Dos de las tapas están recortadas dejando solo el aro de ajuste a modo de reducción para que al apilar los cubos no encajen hasta el fondo. La última tapa se deja entera para cerrar arriba.

Y eso es todo. Como he dicho, solo me falta echar las lombrices y que empiecen su magia.